Kanaky Nueva Caledonia vive otra oleada de violencia debido al encarcelamiento de siete activistas melanesios que se manifestaron el pasado fin de semana exigiendo la independencia de Francia. París acusa a los independentistas de organizar actos violentos, por lo que han sido enviados a Francia para ser encarcelados. Se ha encendido la ira en en este archipiélago melanesio, sometido al colonialismo francés desde 1853 y desde donde se exige su liberación y regreso.
`La expulsión de los líderes independentistas a más de 17.000 kilómetros de sus hogares como parte de su detención preventiva viola gravemente su derecho a la vida privada y familiar´, ha denunciado la Liga de Derechos Humanos (LDH). El Alto Comisionado, representante del Estado francés, dijo que entre el 23 y 24 de junio hubo distintos altercados en la capital Nouméa, así como en Grande Terre , la mayor y principal de las islas y en las islas exteriores de Maré y los Pinos. Según el representante, hubo `varios incendios controlados´ en la ciudad que afectaron locales comerciales y algunos vehículos particulares y otros de la policía municipal. El diario Nouvelle Calédonie la Première dijo que varios edificios, entre ellos una comisaría de policía y un ayuntamiento, fueron incendiados.
Por su parte el fiscal de Nouméa , Yves Dupas, dijo que un hombre de 23 años falleció de una `dificultad respiratoria´ al cruzar un control de policía de la capital. Varias carreteras y pasos fueron bloqueados durante las manifestaciones. Algunas escuelas fueron cerradas en todo el territorio debido a los altercados en las calles, la dificultad para llegar a los hospitales y el latente temor de un nuevo episodio de violencia generalizada.