`
… La isla de Raiatea es una isla montañosa, con un pico muy alto, cuya base parece ceñida por un cinturón de cocoteros. Desembarcar en Uturoa es sumergirse en un baño de vainilla y tiare y de aceite de monoï. La vegetación es lujururiante y el lenguaje de los cocoteros, con dos brazos abiertos en oferta de paz y sensualismo.
Las vahine que por las calles circula con la eterna sonrisa para el viajero en los labios, tienen una cabellera brillantes que les cae a la espalda, y su piel, un bronzeado digno de la más bella starlet de la Costa Azul. Uturoa consta en realidad de dos calles: una lleva al puerto, y otra, en el fondo perpenticular a la primera, donde se haya “el hotel“, la iglesia, la escuela, los modestos edificios administrativos y las tiendas de postales y curiosidades.
Es cierto que también hay la prosa de los hangares, con sus sacos de copra, latas de petróleo vacias y algún que otro pie en carne viva y que en las puertas de las tiendas hay sentados unos chinos con lentes y ojos de intoxicados. Pero también hay flores de tiare, montones de anánas, sacos de ostras, cestos de langostas y cangrejos y aquellos sombreros de paja de alas anchas, que, en lugar de cintas, llevan una caracolillos de reflejos metálcios y colores inverosímeiles que dan sombra a los torsos escultóricos de los hombres y de las vahine …
Manuel Bosch i Barret
Manuel Bosch i Barret , nacido en Barcelona en 1895. Abogado y escritor. Presidente del Tribunal Internacional Mixto de las Nuevas Hébridas, hoy Vanuatu, de 1936 a 1939. Su misión era dirimir disputas entre los dos poderes coloniales en las islas: Francia e Inglaterra. Fue nombrado como tal en recuerdo a Pedro Fernández de Quirós. Su cargo fue ficticio y sin poder real pues evidentemente aquellos países europeos no deseaban que nadie interfiriese en sus tierras conquistadas. Manuel Bosch i Barret no contó con ningún apoyo de España, pues en el momento de su viaje hacia Melanesia, el país se precipitaba a la guerra civil. Su estancia en Melanesia y la visita a otros archipiélagos del Pacífico Sur dieron lugar, a su regreso a la capital catalana , a la publicación de libros como Doña Isabel Barreto, Adelantada de las Islas Salomon (1943) una biografía de Doña Isabel Barreto, primera mujer almirante y adelantada de las Islas Solomon; Xavier o la isla de Iman (1944), Pensión Ultramar (1945) y Tres Años en las Nuevas Hébridas (1945) esta última obra sin lugar a dudas, la más interesante y valiosa como documento histórico para la tristemente olvidada presencia española en las Islas del Pacífico.