A principios de la década de los sesenta Tahiti y sus Islas fueron elegidas por Francia para convertirse en el campo de pruebas de ensayos nucleares. Entre julio y enero de de 1996 tuvieron lugar en los atolones de Moruroa y Fangataufa, en el archipiélago de las Tuamotu, 193 explosiones aéreas y subterráneas. El 18 de enero de 2012 el senador tahitiano Richard Tuheiava presentó un proyecto de ley que incluía la restitucción de las islas a la colectividad, tal como se había acordado con el estado francés 50 años atrás. Tres horas más tarde fue aprobada, una victoria puramente simbólica ya que también debía ser aprobada por la Asamblea Nacional. El documental Essais Nucléaires, un héritage sans fin de Thierry Derouet Nathalie Barbe (Francia – 2012), muestra los efectos de las explosiones nucleares entre la población polinesia y 15 años después de que estas llegaran a su fin . Aparte de las consecuencias radiologicas se presenta otro posible problema, el colapso del anillo coralino ; el 27 de enero de 20111 Marcel Jurien de la Gravière, delegado del Ministerio de Defensa francés en Tahiti admitió que no se podía excluir la fractura de una parte del atolón de Moa, pudiendo causar una ola de una altitud de hasta 20 metros.