«… Las canciones extranjeras tan sólo poseen erotismo, ningún sentido espiritual. Las danzas son lascivas, no existe una interpretación sagrada. La tierra ha sido arrasada por monstruos de cemento, ni el mar ni el cielo están a salvo de la destrucción. Hay racismo – que jamás conocieron nuestros antepasados- Ni los jóvenes ni los ancianos pueden poseer garantías de dignidad y bienestar, como decretó Kamehameha I. No ha quedado nada Hawaiiano, ahora todo es haole…»
Preludio a la Resistencia : La Descolonización de Hawai’i
Lydia K. Aholo, 1978
Hija adoptiva (hanai) de la reina Lili’uokalani